
“La pobreza aumenta de forma significativa pero la pobreza extrema o la indigencia aumenta más”, destacó Sebastián Waisgrais, Especialista en Inclusión Social de UNICEF durante la presentación del sondeo al que accedió Ámbito. En ese sentido, entre 2019 y 2020 la cantidad de niñas, niños y adolescentes en pobreza extrema pasaría de 1,8 a 2,4 millones.
“El coronavirus afecta la vida de los chicos y las chicas de todas las clases sociales, pero en las familias más pobres el impacto es mucho mayor. En el 15% de los hogares encuestados se tuvo que recurrir a algún préstamo o fiado por parte de algún comercio para comprar alimentos. El porcentaje aumenta al 29% cuando el hogar no tiene ingresos laborales, al 25% en barrios populares y al 22% para los titulares de la Asignación Universal por Hijo”, añadió Waisgrais.